Llevo días enganchada a una filosofía, a un nuevo movimiento, una tendencia…Al principio me dio que pensar, me sirvió de inspiración pero he observado que como una ola viene creciendo y como buena alumna social media la miro con sorpresa y con curiosidad…Pero…Slow… Al principio todo comenzó en Instagram (como casi todo) muchos post sobre comida, viajes, estilo de vida…Slow…y entonces lo supe, me va a enganchar! Y sin embargo…como el que recobra la memoria repentinamente comencé a recordar aquellas tardes de verano con olor a flores y sol, un paseo porque sí a casa de Montse, la noche que comenzabas a leer un nuevo libro y ese característico ritual de sentidos, tardes de sofá y manta frente a los clásicos de la Metro, otoños de ir a saltar en los charcos y momento partirnos de risa…No hubo testimonio gráfico ni momento compartido, no sonaron los timbre de las notificaciones no hubo necesidad de gritarlo al mundo…todo transcurrió tal cual, lo vivimos, lo disfrutamos Slow…
En qué momento se nos fue de las manos aquello que ya tuvimos…En qué momento nos sorprendió la prisa, querer llegar a todo a pesar de todo, el reloj a contracorriente, casi se ve ya el horizonte, vamos a correr un poco más…
En cualquier caso, hoy vivimos doblemente la fortuna de disfrutar de ese renacer con mayor pasión aún. Soy una fiel admiradora y seguidora del impulso creativo de Instagram y Pinterest y creo que su reflejo en este estilo de vida es innegablemente imprescindible…Me dejaré llevar pues de nuevo, cámara en mano esta vez, compartiendo contigo que estarás deseando ver cuanta belleza cabe en el tiempo…Engánchate con nosotros, busca tu momento Slow, tu pasión, tu sitio, tu objeto de deseo y dale forma, dale sentido. Escribir, dibujar, comer, beber, reír, leer, diseñar, cantar, amar…pero Slow!
